Brancellao, variedad autóctona gallega. Para la elaboración de Brancellao, las uvas se despalillaron y maceraron en frío durante cuatro días. El mosto fermentó en barricas de 500 l con bazuqueos y movimientos de lías manuales. El vino maceró y permaneció en las mismas barricas durante tres semanas. Realiza la crianza sobre sus lías en barricas de roble francés de 300 l de 1º, 2º y 3er uso, durante 19 meses.